Mamita querida: Hoy quiero saludarte, acariciar tu carita con pétalos de rosas para que sientas su suavidad, Y es que así te comparo yo, suave, con tu olor tan especial, que me hace recordar mi niñez. Mamita déjame abrazarte y dormir a tu lado para contarte mis cosas, esas que tanto me he guardado. Y solo contigo puedo hablar, igual como cuando era pequeño. Eres el amor más grande que Dios ha creado. Quiero decirte que todo lo que me has enseñado, en mi vida lo he practicado, muchas veces te habré decepcionado, pero ha sido por inmadurez, por mi soberbia, pero nunca porque no me has sabido guiar. Sabias palabras han sabido hacer de mí una buena persona me enseñaste lo más importante mamá... - A ser una persona con principios y valores - Al dejarme que decidiera mi vida me diste responsabilidad, me enseñaste a caminar siempre con la mirada adelante, porque siempre me decías "quien no te mira a los ojos, oculto su pasado tendrá." ( Que sabia eres mamita) Cada caricia...